CONJUNTO RESIDENCIAL 52 VIVIENDAS

La parcela del proyecto se sitúa en el borde noroeste del barrio de Aluche junto a la nacional V, dentro del APE 10.02 de Padre Piquer. Todo el barrio, salvo en muy contadas ocasiones, es fruto de un desarrollo urbanístico en el que escasean las zonas comunes privadas y aún hoy adolece de la falta de cuidado de muchos de los espacios intersticiales entre bloques. Por ello, esta tipología de bloque abierto con zonas comunes es muy escasa en esta zona.

La materialización de todo el APE ha conseguido revalorizar la zona que hasta hace muy poco estaba muy degradada. La construcción de estos edificios de notable calidad residencial revierte muy positivamente en el barrio y contribuye a su regeneración.

La parcela se encuentra dando frente a una vía rápida, lo que llevó a diseñar un edificio que conformara un amplio frente como protección acústica. De este modo, el edificio en sí representa una pantalla que protege las zonas comunes más estanciales

La solución de dos viviendas por núcleo permite que las viviendas tengan ventilación cruzada, con las zonas estanciales de dormitorios, salones y terrazas orientadas a sureste, al interior de parcela y con la zona de servicio de cocinas y tendederos orientada al noroeste donde se concentra el mayor impacto acústico.  Por su situación además, el edificio cuenta con unas estupendas vistas.

Uno de los objetivos de diseño fue el de conseguir versatilidad dentro de las viviendas. Para ello se planteó un espacio con unas dimensiones extra que el usuario pudiera personalizar según sus necesidades particulares.  Entre las posibles variantes se podía incorporar a la cocina creando un office, añadir al salón para aumentar su superficie o dejarlo independiente como espacio de almacenaje, permitiendo una doble circulación a través de la cocina.

Durante la fase de diseño y ejecución se trabajó con la calificación Breeam y por ello se llevó a cabo el cumplimiento de estándares de sostenibilidad en cuanto al origen de los materiales empleados, a la eficiencia de las instalaciones, a la economía en el uso de recursos naturales… Por este motivo, se utilizaron en la obra áridos reciclados, se seleccionaron especies autóctonas de bajo consumo hídrico para las zonas comunes, se incorporó el control automático del encendido y apagado de la red de alumbrado de zonas comunes, así como espacios para el reciclado en cada vivienda y la posibilidad de ajuste de la climatización de cada estancia de manera independiente dentro de cada vivienda, también se dispuso un espacio para compostaje en la urbanización, por citar sólo algunas de las medidas que tomaron.